Un señor de la tercera edad vivía en un lugar con pésimas condiciones. No contaba con fuentes de agua y luz. Tras mucho tiempo y sin esperarlo, al momento de abrir la puerta lo que se encontró fue con algo emotivo que le cambiaría la vida para siempre.
Esta es la historia de Don Roberto, quien tuvo la desdicha de vivir en un lugar poco apto para pasar el día a día. No es ninguna novedad que los ancianos en su gran mayoría viven en pésimas condiciones. Gracias al gran corazón de algunos vecinos, este señor con 81 años de edad obtuvo posiblemente el mejor regalo de su vida. Tanto fue así, que era la primera vez que sonreía y se le veía feliz.
Por muchos años, Roberto vivió en un lugar sin luz eléctrica, ni agua caliente a la que pudiera acceder para darse un baño agradable. De hecho, carecía de muebles y la cama a duras penas le permitía descansar por las noches.
Al ver tal situación, los vecinos a su alrededor se reunieron con el objetivo de darle un poco de confort al hombre. Gracias a este gesto, el cambio que obtuvo en su vida fue drástico, en el buen sentido. Tanto fue así, que toda su casa se renovó en su totalidad. Si hacemos una comparación del antes y el ahora, no creerías que se trata del mismo lugar.
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Claro, no fue un cambio de la noche a la mañana, sino que poco a poco se fue consiguiendo el lugar perfecto para Don Roberto en el que vive actualmente. Cada vecino aportaba su grano de arena cada día y se iban turnando entre ellos mismos.
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Por otro lado, la historia de Roberto se dio a conocer gracias a las publicaciones hechas en Instagram. Gracias a esto, la gente fue conectando con Don Roberto. Entre las publicaciones hechas, se mostró que su inodoro no estaba en funcionamiento, el piso estaba completamente roto, no contaba con un sistema de agua caliente durante las épocas frías y mucho más.
Fue gracias a esto que los vecinos a los alrededores se enteraron de tal situación que la comunidad se unió para darle la ayuda que necesitaba. A partir de este momento, el señor Roberto comenzó a recibir todo tipo de donaciones que harían de su calidad de vida, mejor.
Fue inevitable no hacerle fotografías a Roberto. Su cara de felicidad era algo que no se podía pasar por alto. Ahora su pequeño lugar de estancia se convirtió en un sitio acogedor en el que puede descansar y tener ciertas comodidades que antes no poseía. De hecho, su hogar se transformó completamente al punto de no ser reconocido.
Es importante mencionar que hubo un vecino que tuvo la gentileza de donarle una cocina junto con un microondas. Por lo que ahora este señor de tan avanzada edad podrá cocinar comida de mejor calidad. Y si te preocupa dónde almacenará su comida, también cuenta con un refrigerador, así que literalmente tiene todo lo que necesita para estar tranquilo y cómodo.
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Este no es el único caso en el que hombres o mujeres de la tercera edad viven en tales condiciones. Son miles de viejos que están pasando por una realidad muy dolorosa cada día. Según datos de la OMS, alrededor del 20% de todos los ancianos del mundo sufren de algún abuso o viven en condiciones precarias. Ya sea a raíz de familias o cuidadores que han sido negligentes con sus familiares más viejos.
Tristemente, nuestras capacidades se van degradando a medida que nos hacemos más viejos. Por lo tanto, deberíamos ser más empáticos con nuestros ancianos y darle las condiciones adecuadas para que vivan tranquilos. A fin de cuentas, también llegaremos a ese punto, con alguna enfermedad o discapacidad física o mental. Lo más seguro es que quieras algún tipo de ayuda o trato especial.
Por este y muchos otros motivos es que resulta importantísimo hacer conciencia en nuestra población con relación a las personas de la tercera edad. No es una tarea fácil, pero tampoco imposible.
