Cuando se trata de empleos, la mayoría de personas tiene uno soñado, todos hemos anhelado poder trabajar justo en el área de preferencia haciendo lo que más disfrutamos. Sin embargo, muchas personas no lo logran, así que sobreviven día a día haciendo todos los esfuerzos necesarios para ganarse la vida, en algo que no les agrada ni un poco.
Su trabajo se convierte en la rutina más monótona, tal es el escenario que al final, terminan trabajando en piloto automático y empiezan a ver el reloj a cada instante esperando que acabe la jornada, para poder huir a casa y desmayarse sobre el sofá producto del agotamiento.
Sin embargo, todo tiene sus límites, así que hay quienes cansados de sentirse atrapados se llenan de la valentía necesaria para arriesgarse y sentirse libres.
A continuación, presentamos a las personas que se llenaron de coraje y se atrevieron a dejar los trabajos con los que eran infelices, son una verdadera motivación para todos.
1 «Dejé mi trabajo el Sábado, me mudé el Domingo, hice una prueba el Lunes, Conseguí el trabajo que realmente quería el Martes, pagué todas mis deudas el Miércoles y hoy he pasado el día con mis perros en la playa. Está siendo una buena semana.»
El tiempo es oro, pero por mucho que te paguen, te acabarás dando cuenta de que su valor no tiene precio.
2 “Después de 5 años empezando a trabajar a las 4 de la mañana, todo el tiempo en el suelo, hoy me han dado la noticia de que empiezo mi nuevo trabajo en un mes, ¡de 8 de la mañana a las 4 de la tarde! Me siendo genial.»
La precariedad laboral, los contratos abusivos y los horarios inhumanos son un problema especialmente común entre los trabajadores más jóvenes.
3 Dejé mi trabajo para pasear perros de forma profesional, ¡sin arrepentimientos! Este es Zeus.
Uno de esos sueños de la infancia que no paran de cuestionar los adultos.
4 “11 meses han pasado desde que dejé mi trabajo. Vendí todo lo que tenía y dejé Seattle para navegar por todo el mundo».
10.000 millas (16.000 kilómetros). Día 323. Malasia.
5 «Dejé mi trabajo, me compré una furgoneta Volkswagen, conduje desde Florida hasta Utah, me la cargué, me compre otro coche y llegué hasta el festival de «Burning Man».
Lo que hay que hacer para ir a un buen festival.
6 «Mi último día en la tienda de los horrores».
Todos tenemos un empleo que jamás echaremos de menos, y si no, ya lo tendrás.
7 «Dejé mi trabajo (que era terriblemente aburrido) para seguir mi sueño de ser artista, hoy tengo mi primera gran exposición».
Los sueños suelen venir cargados de colores.
8 «Dejé el trabajo en el que llevaba 6 años para irme a vivir a la playa y continuar con mi proyecto de fotografía, esta es una de mis fotos preferidas, para motivar a más gente a que de el mismo salto que yo».